Este primer artículo de nuestro nuevo blog nace de la cuarentena, en la cual todos estamos viendo series y películas intentando hacer más ameno este periodo de tiempo que esperemos que vuelva pronto a la normalidad. Estaba viendo la saga de Star Wars cuando pensé en escribir sobre el Lado Oscuro. Para muchos puede significar varias cosas en el mundo del tenis y el padel pero en este caso los tenistas o ex tenistas de competición siempre que vemos a alguien conocido del mundo del tenis en la pista de pádel aparece la frase: “Ya te has pasado al lado oscuro eh!”. Para los desconocedores de qué significa esta frase y del tema que vamos a tratar, es cuando un tenista SEMI-PROFESIONAL deja de jugar a tenis y se pasa a jugar a pádel. En los últimos años, el pádel ha crecido tanto a nivel de juego como de público. Es uno de los deportes que la gente más practica a nivel amateur y en cuanto al público, el pasado Diciembre se produjo un récord histórico en una pista de pádel con casi 10.000 espectadores. Muchos tenistas profesionales retirados a nivel nacional o internacional se han pasado al pádel, al llamado Lado Oscuro para algunos. Una vez impartiendo clase de pádel me preguntaron: Javi, ¿crees que dos ex tenistas profesionales podrían llegar a lo más alto del pádel con mucha más facilidad que un jugador de pádel? Mi respuesta fue: considero que en categoría femenina si, el paso a la élite sería más alcanzable y con más facilidad que en categoría masculina. Por ejemplo, Marta Marrero en muy poco tiempo de aprendizaje estuvo entre las 50 primeras jugadoras del mundo y ahora ya ha alcanzado el número uno. Considero que en categoría masculina faltan muchas otras cualidades además de un alto ritmo de juego y una excelente preparación física. Actualmente, vemos jugadores muy jóvenes en lo más alto con golpes de ataque determinantes y específicos como voleas cortadas muy pulidas, remates por tres desde la línea o remates en paralelo trayéndosela a su campo con una facilidad brutal y con un concepto del juego rozando la perfección. Además, solo los tenistas con una buena psicología mental serán capaces de trasladarlo al pádel ya que por un lado el concepto de juego es diferente y por otro lado y fundamental, que juegas con otra persona a la que te tienes que adaptar. En definitiva, ambos deportes son parecidos pero se necesitan cualidades diferentes. Y aunque considero que es más fácil pasarse del tenis al pádel que viceversa, eso no asegura alcanzar un nivel top en un periodo de tiempo corto. Ahora bien, a niveles SEMI-PROFESIONALES, soy el primero que me pasé al pádel. El motivo fue una lesión muy grave que no me permitió continuar con el tenis y de esta forma podía seguir sintiendo la competición y despejar la frustración. En mi caso, ¿es pasarse al lado oscuro o es una fuga psicológica de una lesión fuerte? Quizás no sea lado oscuro, quizás haya otras razones que provoquen dicho cambio como las lesiones, los estudios universitarios, el fracaso deportivo o incluso no poder soportar económicamente el gasto que supone el deporte del tenis. Recuerdo las primeras partidas de pádel en la que no dejaba pasar la pelota a ninguna pared, voleaba de fondo, quería acabar el punto en tres golpes, me agobiaba cuando llegaba el tercer set porque los puntos y la partida era muy larga, no sabía hacer una bandeja bien, ni jugar en pareja…pero al mismo tiempo observé que todas las personas con las que jugaba me decían: “te vas a acostumbrar enseguida, sigue jugando y verás”. Realmente, mi aprendizaje del concepto de juego y compañerismo fue a base de jugar partidas hasta que entendí como jugar a este deporte. Entendí que no se gana el punto con fuerza y en tres golpes, es una cuestión de paciencia, de efectos, cambios de ritmo, colocar la pelota donde y cuando toque en cada momento, lanzar buenos globos y adaptarse al compañero de la mejor forma posible. Considero que el jugador de tenis SEMI-PROFESIONAL que se pasa al padel semi-profesional, si consigue psicológicamente entender el concepto del juego y a su compañero SI avanzará mucho más rápido que una persona que lleva muchos años entrenando solo a pádel. Ahora bien, hay jugadores a los que les cuesta más y hay jugadores a los que les cuesta menos, también dependerá del estilo de juego que hayan tenido en la cancha de tenis. Por último, comentar este cambio de deporte en un jugador de PRE-COMPETICIÓN el cual no llegó a competir o bien porque sus padres no querían, o porque se ponía muy nervioso en los partidos o porque tuvo que dejar el tenis muy pronto por otras causas. Este caso lo quiero reflejar con el ejemplo de un alumno al que imparto clases de pádel. Luis estuvo jugando a tenis hasta la adolescencia pero sin llegar a competir. Le estuve dando clases de tenis en grupo durante dos meses aproximadamente porque quería retomarlo. Empezó a observar que no era el mismo de antes, le costaba mucho meter la pelota dentro, no sentía la pelota en su derecha y revés y le notaba frustrado. Un día me preguntó, ¿Oye Javi, veo que no acabo de sentirme cómodo, que te parece si pruebo en pádel? Le dije: tengo claro que con la volea y el saque que tienes avanzarás rapidísimo, vamos a probar, pero empezaremos desde la base y prestando atención a cada corrección. Comenzamos con clases grupales de nivel iniciación y posteriormente le introduje poco a poco en clases con más nivel hasta alcanzar las clases de pre-competición. En un año y medio aproximadamente ya está jugando torneos de pádel en 3ª categoría a nivel provincial y por equipos. Creo que las capacidades adquiridas en su etapa tenística han hecho que el avance sea mucho más rápido que el de una persona que hubiese empezado jugando a pádel al mismo nivel que él. Pero entonces, ¿Luis se ha pasado al Lado Oscuro? JAVIER RIPOLLÉS BRU COORDINADOR DEPORTIVO